Los Adventistas y la Navidad – Los villancicos continúan

Concluyó otra navidad, pero la batalla en las filas adventistas continúa.

Alrededor de estas fiestas de fin de año es fácil encontrar entre los medios de comunicación seculares mucha información sobre la Navidad.

Como este artículo de la MSN titulado «Jesús no nació el 25 de Diciembre.»

Cito parte de ese artículo:

«Según el historiador de las religiones Mircea Eliade, el 25 de diciembre se conmemoraba el nacimiento de todas las divinidades solares orientales. De la misma forma, Jaime Borja afirma que ese día es el solsticio de invierno y se conmemoraban las fiestas saturnales en Roma, que representaban el triunfo del sol sobre las tinieblas.»

Fuente: http://www.msn.com/es-ve/noticias/mundo/jes%C3%BAs-no-naci%C3%B3-el-25-de-diciembre/ar-BBxsrqb

El líder mundial de los ateistas, Richard Dawkins, en su página principal escribió un artículo titulado «Una Navidad muy atea» en la cual él dice que los ateos pueden celebrar la Navidad ya que esta celebración y el árbol de Navidad tienen sus origenes en celebraciones paganas y que posteriormente fueron adoptadas por el cristianismo.

En las palabras de Dawkins:

«La Navidad es ahora ‘cristiana’ porque las celebraciones paganas antiguas del invierno fueron incorporadas por la iglesia.»

Fuente: https://richarddawkins.net/2012/12/a-very-atheist-christmas/

Artículos seculares como estos de variadas fuentes «oficiales» y no simples «blogs» como el que usted está leyendo, que confirman el origen pagano de la navidad, abundan.

History Today: https://www.historytoday.com/matt-salusbury/did-romans-invent-christmas

Judaism Online: http://www.simpletoremember.com/vitals/Christmas_TheRealStory.htm

The Baltimore Sun: http://www.baltimoresun.com/features/retro-baltimore/bal-retro-baltimore-remembering-saturnalia-the-pagan-precursor-to-christmas-20161221-story.html

La Encliclopedia Británica: https://www.britannica.com/topic/Saturnalia-Roman-festival

El History Channel: http://www.history.com/topics/christmas/history-of-christmas

Pero, a pesar de toda esta abundancia de pruebas seculares, científicas, oficiales y determinantes, cada fin de año dentro de nuestra iglesia adventista surgen pastores estrellas de youtube y predicadores estrellas de facebook que tienen «otras fuentes más verídicas» que las del mundo entero, las cuales «demuestran determinadamante el origen cristiano de la navidad.»

Tanto así, que hoy por hoy se puede ver en youtube a cierto pastor adventista muy admirado y respetado declarando que el arbolito de Navida simboliza a Jesús!

Al paso que vamos la navidad siguiente habrá quien salga diciendo que Papa Noel simboliza también a Jesús. Y no sería muy dificil de imaginar, tomando en cuenta que para la iglesia católica Santa Claus es un santo católico que «intercede» por nosotros. Es decir, es un sustituto de nuestro Sumo Sacerdote en el Santuario Celestial.

Fuente (ACI Prensa): https://www.aciprensa.com/noticias/video-cortometraje-animado-de-navidad-revela-al-verdadero-santa-claus-64070/

Pero es admirable el esfuerzo al que recurren ciertos hermanos adventistas para hacernos comprender nuestra extrema ridiculez al no querer celebrar la navidad por su origen pagano.

Me sorprendía al leer unas palabras que circulan por las redes sociales que dicen:

«Sí, deberiamos por ejemplo, quitar el triángulo y el pentágono de las figuras geométricas, los niños no deberían aprenderlas.

Deberíamos extinguir a las serpientes, a los pinos, quitar todos los días de la semana, porque tiene cada uno su dios.

Deberíamos quitar los meses del calendario, poner una bomba en el sol, la luna y las estrellas y olvidarnos de la cruz, pues también es pagana.

Sacar de nuestra dieta todos los frutos del campo, pues Caín los ofreció a los ídolos, no sacar fotos ni hacer dibujos o pinturas.

Deberíamos erradicar todos los instrumentos musicales, menos el piano, eliminar toda la música menos el himnario Adventista y usar como ropa, solo hojas de higuera…»

Es lamentable como perdemos el sentido común al querer defender algo que «escrito no está.» Como si la geometría y la ciencia pudiera ser comparable con celebrar la Navidad. El hermano dice que debemos poner una bomba en el sol pues es pagano. Este hermano debería leer el libro de Génesis donde dice que Dios creó al sol. El problema no es el sol. El problema es la gente que rinde culto al sol – esto es idolatría. Y Dios aborrece la idolatría.

«Así ha dicho Jehová: No aprendáis el camino de las naciones, ni tengáis temor de las señales del cielo, aunque las naciones las teman. Porque las costumbres de los pueblos son vanidad: Cortan un árbol del bosque, y las manos del escultor lo labran con la azuela. Lo adornan con plata y oro; lo afirman con clavos y martillo para que no se tambalee. Son como un espantapájaros en un huerto de pepinos.» (Jeremías 10:1-5)

«Yo haré que vuestra infamia recaiga sobre vosotras mismas, y cargaréis con los pecados de vuestra idolatría. Y sabréis que yo soy el Señor Jehovah.» (Ezequiel 23:49)

«Por tanto, amados míos, huid de la idolatría.» (1 Corintios 10:14)

Siempre que el pueblo de Dios fue llevado en cautiverio, la causa fue su participación de la idolatría.

«La ley fue preservada por Noé y su familia, y Noé enseñó los Diez Mandamientos a sus descendientes. Cuando los hombres se apartaron nuevamente de Dios, el Señor eligió a Abraham, de quien declaró: ‘Oyó Abraham mi voz, y guardó mi precepto, mis mandamientos, mis estatutos, y mis leyes’. Génesis 26:5. Instituyó el rito de la circuncisión, como señal de que quienes lo recibían eran dedicados al servicio de Dios, y prometían permanecer separados de la idolatría y obedecer la ley de Dios. La falta de voluntad para cumplir esta promesa, que los descendientes de Abraham evidenciaron en su tendencia a formar alianzas con los paganos y adoptar sus prácticas, fue la causa de su permanencia y esclavitud en Egipto.» {PP 333.2}

Cuando el joven Daniel y los jóvenes hebreos fueron llevados en cautiverio a Babilonia, a todos ellos les fueron cambiados sus nombres por nombres de dioses paganos babilónicos.

«A éstos, el jefe de los funcionarios les puso nombres: A Daniel llamó Beltsasar; a Ananías, Sadrac; a Misael, Mesac; y a Azarías, Abed-nego.» (Daniel 1:7)

Ni Daniel ni sus compañeros protestaron contra este hecho. Por qué? Porque ellos eran estudiosos de la Biblia y se basaban en un escrito está para tomar todas sus decisiones, y en ningún lugar de la Biblia se prohibe tener nombre pagano, no se prohibe dibujar triángulos o pentágonos, no se prohibe tener un pino en la casa, no se prohibe que los días de la semana o de los meses tengan nombres paganos (de hecho los mismos israelitas usaban nombres de dioses paganos para sus meses: Aviv, Nisán, Tammuz, etc.), no se prohibe usar relojes, celulares,  ni instrumento o ciencia inventada por un pagano; lo que Dios prohibe es PARTICIPAR DE LA IDOLATRÍA.

Es por esta razón que Daniel y sus compañeros hebreos (los cuales hoy en día serían considerados fanáticos y extremistas religiosos dentro de la iglesia adventista) decidieron no comer del banquete del rey de Babilonia. Muchos de nuestros pastores dicen que Daniel no participó del banquete porque «era vegetariano.» Como si en algún pasaje de la Biblia dijera que era un banquete netamente carnívoro, sin frutas ni verduras ni cereales que Daniel y sus compañeros pudieran haber comido. Daniel era vegetariano, pero esta razón no fue el motivo por el cual no participaron del banquete del rey. La razón por la que no participaron del banquete es que UNA PORCIÓN (ni siquiera todo el banquete) estaba dedicado a los ídolos de Babilonia, por tanto PARTICIPAR del banquete era PARTICIPAR de la idolatría. La comida en sí no era pecado. Comer no es un pecado, todos debemos comer. Pero comer de esa comida sacrificada a los ídolos era participar de la idolatría, y esto sí es pecado.

«Una prueba decisiva les sobrevino a Daniel y sus compañeros al empezar su carrera. La orden de que se les sirviera la comida de la mesa real era una expresión del favor del rey, y del interés que tenía por su bienestar. Pero como una porción era ofrecida a los ídolos, la comida de la mesa del rey era consagrada a la idolatría; y si los jóvenes participaban de ella, se iba a considerar que rendían homenaje a los dioses falsos. La lealtad a Jehová les prohibía que tuvieran parte en semejante homenaje. Ellos tampoco se atrevían a arriesgarse a sufrir los efectos enervantes del lujo y la disipación sobre su desarrollo físico, mental y espiritual.» {ED 52.2}

Sin embargo, hay muchos teólogos dentro de nuestras filas que afirman que los que no queremos participar de la navidad porque sería participar de un rito pagano, somos «débiles en la fe», tomando citas del apóstol Pablo en Romanos capítulo 14 y 1 Corintios capítulo 8.

Estos eruditos, sin embargo, pasan por alto el hecho de que en el Primer Concilio Cristiano en Jerusalén (del cual participó el apóstol Pablo), se determinó concluyentemente instar a los gentiles que se convertían al cristianismo a abstenerse de alimentos ofrecidos a los ídolos. Sería, por tanto, sumamente contradictorio que el apóstol Pablo saliera de dicho Concilio para escribir cartas diciendo a los hermanos que era correcto comer alimento sacrificado a los ídolos y que los que se abstenían eran «débiles en la fe.»

«Sino escribirles que se aparten de las contaminaciones de los ídolos, y de fornicación, y de ahogado, y de sangre.» (Hechos 15:20)

El comentario de la hermana White sobre Hechos capítulo 15 se encuentra en su libro Hechos de los Apóstoles.

«Plugo al Espíritu Santo no imponer la ley ceremonial a los conversos gentiles, y el sentir de los apóstoles en cuanto a este asunto era como el sentir del Espíritu de Dios. Santiago presidía el concilio, y su decisión final fué: ‘Yo juzgo, que los que de los Gentiles se convierten a Dios, no han de ser inquietados’.» {HAp 158.3}

«Los conversos gentiles, sin embargo, debían abandonarlas costumbres inconsecuentes con los principios del cristianismo. Los apóstoles y ancianos convinieron por lo tanto en pedir a los gentiles por carta que se abstuvieran de los alimentos ofrecidos a los ídolos, de fornicación, de lo estrangulado, y de sangre. Debía instárselos a guardar los mandamientos, y a vivir una vida santa. Debía asegurárseles también que los que habían declarado obligatoria la circuncisión no estaban autorizados por los apóstoles para hacerlo.» {HAp 159.1}

El Espíritu Santo les llevó a la conclución de que no se debía inquietar a los conversos gentiles con cosas de menor importancia. «Sin embargo» había algo que sí era de gran importancia: «que se abstuvieran de los alimentos ofrecidos a los ídolos

Ese mismo Espíritu Santo que los  inspiró a tomar esa decisión, no iba a inspirar a Pablo a contradecir esta determinación al escribir la carta de Romanos o la de 1 Corintios.

La Biblia no se contradice, el Espíritu Santo no se contradice. Pablo no contradijo al Primer Concilio. Los que se contradicen son los teólogos navideños.

Es por esto, que después de su larga exposición, Pablo concluye diciendo:

“Lo que los gentiles sacrifiquen, a los demonios sacrifican, y no a Dios; y no quiero que vosotros hagáis. No podéis beber la copa del Señor, y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Señor y de la mesa de los demonios.” (1 Corintios 10:20-21)

No podéis participar de la mesa del Señor y de la mesa de los demonios. Esto es el punto con el que Pablo concluye, haciendo eco de la decisión tomada en Hechos 15:20. Nos guste o no nos guste.

En esta página de estudios bíblicos, hemos tomado el tiempo de realizar dos estudios bíblicos sobre la Navidad en años pasados. Estos estudios han sido compartidos por nuestros lectores en las redes sociales, y a causa de todo esto hemos sido catalogados de criticones, extremistas, débiles en la fe, fariseos, y con una «agenda en contra de la iglesia.»

Aceptamos que nos digan que somos criticones, extremistas, débiles en la fe y fariseos. Después de todo, es mil veces preferible ser un criticón, un extremista, un débil en la fe, y un fariseo ante los ojos de los hombres que comparten nuestra misma naturaleza pecaminosa; a ser ante los ojos de un Dios santo: un pagano, un idólatra, un apóstata o un mundano.

Dios será quien juzgará nuestros actos, nuestros estudios y nuestra influencia sobre el pueblo adventista. Y asímismo Dios también juzgará al mundo entero, tanto a anti-navideños como a pro-navideños.

Lo que bajo ningún motivo aceptaremos es que se nos acuse de «atacar a la iglesia.»

¿Quién es la iglesia?

¿Acaso la iglesia no es el conjunto de creyentes?

HA pg. 10.3 – “Desde el principio, las almas fieles han constituido la iglesia en la tierra.”

Mateo 18:20 – “Porque donde dos o tres están congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.”

¿Cómo define la Palabra de Dios a la “iglesia”?

Colosenses 4:15 – “Saludad a los hermanos que están en Laodicea: a Ninfas y a la iglesia que está en su casa.”

La iglesia no era un edificio o una institución, la iglesia eran los seres humanos que estaban ahí.

1 Corintios 16:19 – “Os saludan las iglesias de Asia. Aquilas y Priscila, con la iglesia que está en su casa.”

Entonces, por qué hablar en contra de la navidad, año nuevo, día de la madre, o cualquier otra crítica, está siendo acusada como un «ataque a la iglesia.»

¿Está siendo la iglesia atacada o está siendo amonestada? ¿Será que no podemos discernir la diferencia?

O es que ahora resulta que la iglesia no somos nostros, sino que son ellos. Si ellos son la iglesia, entonces nosotros qué somos? Naturalmente somos los débiles en la fe, o simplemente somos un diezmo que se recolecta cada sábado?

Nosotros no estamos atacando la iglesia, pues la iglesia somos todos.

Acaso cuando Juan el Bautista dijo a los fariseos y saduceos: «¡Generación de víboras!», estaba atacando a la iglesia o mas bien la estaba amonestando?

Acaso cuando nuestro Señor Jesús dijo a su profeso pueblo: «Vosotros sois de vuestro padre el diablo, y queréis satisfacer los deseos de vuestro padre» (Juan 8:44), estaba atacando a la iglesia? Era criticón?

Y ni qué decir de Jeremías, Isaías, Joel, Oseas, Zacarías, Abías, Sofonías, y tantos otros que hoy por hoy serían catalogados como extremistas, criticones, fariseos y atacantes contra la iglesia. Con razón muchos de ellos murieron apedreados por el profeso pueblo de Dios.

Y por ningún motivo lleguen a pensar que en esta página, en este grupo, nos queremos comparar con alguno de ellos. No les llegamos ni a los talones. No somos auto-proclamados atalayas de Dios. Somos seres humanos como todos, capaces de cometer errores y de caer en pecado y en tentación. Tenemos defectos de carácter y somos faltos de mucha sabiduría.

«Siervos inútiles somos.» (Lucas 17:10)

Pero tenemos en mente que, como protestantes y cristianos, debemos someternos a la Sola Scriptura. La Biblia está por encima de la iglesia. La iglesia no está por encima de la Biblia.

Hay muchos hermanos que parecen tener el concepto católico de pertenecer a una iglesia infalible que no puede fallar y por tanto no puede ser aconsejada, amonestada o criticada. Y tienen el concepto católica que la iglesia son ellos, los que la dirigen, en lugar de todos nosotros los que formamos el cuerpo de ella. Acaparan la iglesia y acaparan la verdad, haciéndose dueños del todo. Luego se sorprenden que haya tantos hermanos que hablen de jesuitas infiltrados. Quizás si nuestros dirigentes estuvieran más preocupados por el mensaje de los tres ángeles que de árboles de navidad y del día de la madre, habría menos teorías de conspiración en nuestras filas.

Lo que nos lleva a nuestro último punto sobre este tema.

Concordamos con los hermanos y dirigentes que dicen que en lugar de que haya tanta controversia dentro de la iglesia, enfoquemos nuestros ojos en Cristo y en predicar el Evangelio.

¿Pero qué es el Evangelio?

El Evangelio era todo lo que el sacerdote terrenal del Pacto Antiguo realizaba en el atrio del santuario para poder ingresar al santuario terrenal. Todo el ritual simbólico, todos los ritos y ceremonias del Pacto Antiguo, eran una representación en símbolos del Evangelio.

PR pg. 359.2 (390.1) – “En el antiguo ritual que era el Evangelio en símbolos, ninguna ofrenda imperfecta podía ser llevada al altar de Dios. El sacrificio que había de representar a Cristo debía ser sin mancha. La palabra de Dios señala esto como ilustración de lo que deben ser sus hijos: un ‘sacrificio vivo,’ santo y ‘sin mancha’ (Romanos 12:1; Efesios 5:27).”

Comentario Bíblico 7ª pg. 335 – (Isaías 45:21-22; Mateo 16:24; Juan 1:29) – “Mirad y vivid—Cristo colgado de la cruz, era el Evangelio.”

En 1 Corintios 15:1-4 encontramos el significado de la palabra Evangelio, la síntesis:

“Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis. Por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano. Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo fue muerto por nuestros pecados conforme a las Escrituras. Y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras.”

El Evangelio es la obra de Cristo que hizo en la tierra como hombre.

El Evangelio no es el «niño dios» en un pesebre.

El Evangelio es la vida de obediencia perfecta y perpetua a la ley de Cristo como hombre. El Evangelio es su muerte en la cruz por nuestros pecados. El Evangelio es su resurrección y su ascención al cielo para ser nuestro intercesor en el Santuario Celestial.

El Salvador en el pesebre no tenía ni la ofrenda ni el sacrificio necesario para presentarse por nosotros ante Dios Padre y la Ley en el Santuario (Hebreos 8:3). El Salvador en el pesebre no es el Evangelio, es tan solo el comienzo del Evangelio.

La iglesia adventista es un pueblo que fue suscitado por Dios con un propósito: la proclamación del triple mensaje angélico al mundo entero. Ésta es nuestra misión y ésta misión será cumplida con o sin nosotros. Alguien la realizará y la Palabra de Dios se cumplirá en su plenitud.

Nuestro mensaje no es el del «cumpleaños» de Jesús, ni el de Jesús en un pesebre.

Nuestro mensajes es del Jesús como un Sumo Sacerdote en el Santuario Celestial, que presenta su justicia para nuestra justificación y para que podamos recibir la lluvia temprana. Un Sumo Sacerdote que presenta su sangre derramada en la cruz para que nuestros pecados puedan ser perdonados y transferidos al Santuario. Un Sumo Sacerdote que intercede por nosotros mientras se realiza el Juicio Investigador y que pronto realizará el Juicio de Vivos empezando por su profeso pueblo que profesa creer en el triple mensaje angélico.

Ese es nuestro mensaje, esa es nuestra misión. Todo lo demás es pérdida de tiempo y vanidad de vanidades.

Que Dios los bendiga.

Una respuesta para “Los Adventistas y la Navidad – Los villancicos continúan”

  1. Por años he predicado esta verdad y lo he presentado a mi iglesia Adventista con el rechazo ya de prácticamente todos. Es difícil entender por qué el pueblo de Dios es tan ciego a sus verdades escritas. Dios nos tenga misericordia. Tanta lástima me da ver hasta los presidentes de nuestras organizaciones sacando fotos con sus familias con gorritos de santa claus y cientos por no decir miles de dólares invertidos en decoración navideñas. Sí, también ya soy considerado por muchos como extremista y hasta anti-White, cosa que no soy pues leo de todo pero solamente me quedo con lo bueno y acorde a un Escrito Está. Dios te siga bendiciendo por tus amonestaciones a la iglesia del Dios Creador y Redentor.

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